Si crees que tienes un mal día, mira lo que le pasó a este muchacho.
Un hombre estaba trabajando en su motocicleta en su patio y su esposa estaba en la cocina. El hombre estaba acelerando el motor de la motocicleta cuando accidentalmente se puso en movimiento. El hombre, agarrado al manillar, fue arrastrado a través de las puertas de vidrio del patio y junto con la motocicleta tirado al piso dentro de la casa.
La esposa, al escuchar el choque, corrió hacia el comedor y encontró a su esposo tirado en el piso, cortado y sangrando, la motocicleta a su lado y la puerta del patio rota. La esposa corrió al teléfono y llamó a una ambulancia. Debido a que vivían en una zona elevada, la esposa bajó varios tramos de escaleras hasta la calle para acompañar a los enfermeros junto a su esposo.
Después de que llegó la ambulancia y transportó al hombre al hospital, la esposa levantó la motocicleta y la empujó afuera. Al ver que se había derramado gasolina en el piso, la esposa tomó algunas toallas de papel, secó el líquido y tiró las toallas al inodoro.
En el hospital, el hombre fue tratado y dado de alta para que regresara a casa. Al llegar a casa, miró la puerta del patio rota y el daño hecho a su motocicleta. Se desanimó, fue al baño, se sentó en el inodoro y se fumó un cigarrillo. Después de terminar el cigarrillo, lo arrojó entre las piernas a la taza del inodoro, mientras estaba sentado.
La esposa, que estaba en la cocina, escuchó la fuerte explosión y los gritos de su esposo. Corrió al baño y encontró a su esposo tirado en el suelo. Le habían volado los pantalones y sufría quemaduras en las nalgas, la parte posterior de las piernas y la ingle.
La esposa corrió nuevamente al teléfono para llamar a una ambulancia. Se envió el mismo equipo de enfermeros y la esposa los recibió en la calle. Los enfermeros cargaron al marido en la camilla y empezaron a llevarlo a la calle. Mientras bajaban las escaleras hacia la calle acompañados de la esposa, uno de los enfermeros le preguntó a la esposa cómo se había quemado el esposo. Ella les dijo como y los enfermeros se echaron a reír tan fuerte que uno de ellos resbaló y volcó la camilla, tirando al marido. El motorista cayó por las escaleras y se rompió el brazo.
Publicado en un periódico del estado de Florida (USA).