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Un viejo granjero está tratando de mantener su granja hasta que su hijo motero pueda salir de la cárcel para ayudarlo con todo.

El granjero le envía una carta a la cárcel diciéndole que necesitaría ayuda para plantar la cosecha de patatas en un determinado campo.

Como respuesta, el motero le envía otra carta a su padre:

"Papá, no te acerques a ese campo. Allí es donde tengo enterradas todas mis armas".

Espero que el alguacil y sus ayudantes te hayan ayudado ...Pero, como está en la cárcel, toda la correspondencia está censurada, el alguacil y sus ayudantes se enteran de esto, salen corriendo a la granja y cavan todo el campo en busca de armas.

Después de dos días completos de excavación, no encuentran una sola arma. El motero le envia otra carta a su padre:

"Espero que el alguacil y sus ayudantes te hayan ayudado ...

¡es lo que puedo hacer desde aquí adentro!"


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