Una viejecita quería unirse a un club de moteros. Llamó a la puerta de un club local y un motero grande, peludo y barbudo con tatuajes en los brazos le abre. La viejecita le dice:
"Quiero unirme a vuestro club de moteros".
El chico se sorprendió y le dijo que tenía que cumplir con ciertos requisitos de motero antes de que se le permitiera unirse a su club. Entonces el motero le pregunta:
"¿Tienes una burra?"
"Sí, esa es mi Harley", mientras señala a una Harley estacionada en el camino de entrada.
El motero le pregunta:
"¿Fumas?"
La viejecita dice:
"Sí, fumo. Fumo 4 paquetes de cigarros al día y un par de cigarros puros mientras estoy jugando al billar".
El motero está impresionado y pregunta:
"Bueno, ¿alguna vez te han pillado los puntitos?" (puntitos: guardia de tráfico en argot radioaficionado).
La viejecita dice:
"No, no me han pillado los puntitos, pero muchas veces me han pellizcado los pezones".